Una pausa para idear un huerto a base de abono orgánico ecológico

En esta ocasión, nos haremos eco del asunto que acapara todos los medios, como no podía ser de otra manera, el estado de alerta impuesto por el Gobierno de España para combatir un virus a nivel mundial y con una tasa muy alta de contagio.

El permanecer confinados en casa no es fácil de llevar pero, si pensamos en los beneficios que se derivan de esta medida tan dura, nos puede ayudar a sobrellevarlo mejor. La principal arma para combatir el virus tiene que ver con nuestra capacidad de solidaridad y responsabilidad.

Se han dado numerosos consejos para llevar el confinamiento lo mejor posible, leer, ver películas, hacer ejercicio online, salir a las ventanas para sentirnos lo más cerca posible de los vecinos… pero también es cierto que esta situación nos lleva a pensar en muchas cosas en las que, de otra manera, no hubiéramos reflexionado.

Los huertos urbanos están teniendo cada vez más aceptación, cultivar productos naturales, degustar sabores auténticos, disfrutar de alimentos que nosotros mismos hemos plantado, unido a lo gratificante de la actividad de cultivar nuestro huerto y utilizar un abono orgánico ecológico, libre de sustancias químicas, en provecho y para beneficio de la salud de nuestra familia, de la nuestra y de la del planeta, es todo un aliciente.

Así que, podemos aprovechar este tiempo para planificar la forma de comenzar a cultivar nuestro huerto urbano, buscar información y comprar abonos ecológicos y fertilizantes ecológicos en comercios online. Gracias a este encierro, a la limitación de la circulación aérea, marítima y terrestre, están bajando los niveles de gases contaminantes, como nunca se hubiera conseguido en circunstancias normales.

Igual era la única forma que nuestro planeta encontró para que reflexionemos, para que tengamos tiempo para pensar de que manera podemos contribuir a sanear la salud de nuestra tierra, del mundo, de nuestro planeta.

Apostar por lo natural va en beneficio de todos, comprar abonos ecológicos para cultivar alimentos naturales, utilizar fertilizantes ecológicos para una tierra más productiva y protegida de plagas que amenacen su desarrollo, puede ser y, de hecho lo es, junto con otras medidas encaminadas a la reducción en la emisión de gases altamente nocivos para la atmósfera, la respuesta que el universo espera de nosotros.

Podemos, entonces, sacar provecho a este periodo de pausa obligatoria y solidaria, para cultivar no solo productos de la tierra mediante abonos ecológicos, sino también, el amor a las personas, el amor a los animales y el amor a un planeta que nos acoge y nos permite vivir.