Rehabilitación sostenible de edificios

Cuando tenemos que acometer una serie de obras para reformar un edificio, es hora de plantearnos el no conformarnos solo con arreglar los fallos o averías y embellecer la fachada sino que, sería un buen momento, para rehabilitar energéticamente la fachada y la cubierta. Mediante el empleo de materiales sostenibles, no solo ganaremos en calidad de vida y en un ahorro considerable de suministro eléctrico sino que también estamos contribuyendo a la conservación y mejora del medioambiente. Al tratarse de productos naturales, es decir, libres de productos químicos en su composición, no dañan la capa de ozono. Menos emisiones nocivas hacen un planeta más saludable.

Un material sostenible es aquel que tanto en su fabricación como en su aplicación y sostenimiento, suponga el mínimo impacto medioambiental. Su procedencia debe ser de origen natural, tierra, corcho, madera, bambú…, perdurable en el tiempo y, por supuesto, reciclables. Para llevar a cabo rehabilitaciones de edificios con materiales destinados a mejorar el aislamiento térmico y acústico, no deben generar residuos tóxicos y ser eficientes a la hora de mantener una temperatura estable.

Garantizando un buen aislamiento térmico en la rehabilitación de edificios, ganaremos en calidad de vida, lo cual ya es una buena inversión y con resultados óptimos a largo plazo.

En los edificios antiguos era muy común el uso de plomo en las tuberías, un material muy contaminante y nocivo para la salud, ya que contamina el agua. En este caso, su reemplazo por tuberías de polipropileno, un producto libre de halógenos y totalmente reciclable, es una saludable medida que hay que tener en cuenta.

Respecto a la iluminación, lo más aconsejable es la sustitución de las luces halógenas o incandescentes por lámparas LED.

Por último, el empleo de energías renovables enfocadas a la climatización del edificio a rehabilitar, contribuye a la reconversión de un inmueble en una vivienda sostenible.

Podemos encontrar más información al respecto en www.hermonrehabilitaciones.com Un buen asesoramiento sobre las medidas más aconsejables a tomar para solucionar los problemas que presente el edificio y mejorar su eficiencia y un estado saludable a lo largo del tiempo, es imprescindible antes de acometer cualquier obra de reforma.

Estas obras suponen un gran coste económico, aunque más que gasto es una inversión y, además, se pueden conseguir ayudas y subvenciones por parte de los organismos pertinentes de cada comunidad autónoma. No estaría de más informarnos al respecto. Una ayuda siempre viene bien. Buena suerte.