Raudo News
18 de Diciembre de 2017 | 10:51
Negocios

El placer de los pasteles de Madrid

 

Cuando viajamos, tenemos una lista de prioridades, todas ellas enfocadas a pasarlo bien. Para empezar, tanto si vamos a una gran ciudad como al corazón de la naturaleza, hemos de tener claro qué monumentos y lugares emblemáticos queremos visitar. Puede ser una gran avenida, una estatua o una montaña singular y mundialmente conocida. Por otro lado, también sabemos que queremos ir de compras. Los souvenirs que solemos comprar cuando nos vamos de vacaciones no son solo para nosotros, sino para nuestros seres queridos. Por eso, debemos destinar una parte de nuestro presupuesto en viajes a los regalos que sabemos que les van a gustar. Lo tercero, pero no menos importante, es la gastronomía. No hay nada más placentero cuando disfrutamos de un sitio nuevo que comer y beber.

 

En este último apartado, el que concierne al estómago y a las papilas gustativas, me gustaría destacar los dulces y los pasteles. No solo contienen los ingredientes necesarios para proporcionarnos la energía que necesitaremos durante horas y horas de caminata y diversión, sino que son versátiles. Es decir, los podemos degustar en el desayuno con un buen café, de postre tras un suculento almuerzo y también, para merendar y cenar. Por eso, si resulta que han decidido ir a Madrid de vacaciones, les recomiendo los deliciosos manjares de las pastelerías industriales de Madrid. Al ser una ciudad grande, pues evidentemente es la capital, tienen un sinfín de pastelerías repartidas a lo largo y ancho de las calles céntricas y periféricas, a cuál más deliciosa.

 

Porque las fábricas de pastelería de Madrid no solo te permiten probar impresionantes tartas de todos los sabores, desde el chocolate más amargo hasta la vainilla más dulce; sino también bollería, galletas varias, helados y, cómo no, el tradicional roscón de Reyes del 5 y el 6 de enero. Se acercan esas fechas mágicas en las que los niños disfrutan de sus juguetes nuevos y los demás, de este riquísimo y artesanal pastel. Por eso, visitar Madrid en Navidades es una grata opción. Además, la iluminación navideña decorando la Gran Vía es una estampa sublime. ¡Merece mucho la pena!